Hermann Schmidlin nació en Valparaíso en 1965. Es un artista de nacionalidad chileno-suiza y ascendencia Mapuche por parte directa de su abuela materna.

Su obra es una combinación entre sus orígenes y el tiempo contemporáneo que le ha tocado vivir. Por un lado, pertenece a una generación de artistas profundamente marcados por los acontecimientos ocurridos durante las décadas de los 70 y 80, un período de rápido crecimiento del capitalismo global, agitación política, diferencias significativas de riqueza, medios de comunicación globales, el apogeo de la Guerra Fría y también el final de la misma, así como la caída del Muro de Berlín. Por otro, su acercamiento al “arte primitivo”, como él mismo dice: “a la implantación de la imagen interior, la impresión psíquica” que tiene relación con sus experiencias en comunidades mapuches a las que se ha acercado en busca de sus raíces, incorporando creencias y formas de entender el mundo.

Sus obras, mayormente gráficas, utilizan como medio el grabado y diversas técnicas de impresión, así como también pintura. Éstas presentan escaso color, suelen ser monocromáticos y contener figuras simples, signos sin referentes que podrían conformar las bases del alfabeto de un nuevo lenguaje.